17 sept 2025

"La extraña herencia" [relato]

 

Un cuadro y un sobre. Extraño legado de un padre a un hijo que jamás conoció.

Su padre, que había huido antes de nacer él, había fallecido. Marco ni siquiera intentó buscarle en vida y tampoco quería recibir aquella extraña herencia ahora que había muerto, pero acabó aceptando a regañadientes. Ya en casa, desembaló el cuadro y abrió el sobre. El cuadro era una especie de retrato inacabado de un hombre al que aún faltaba pintarle el rostro. El sobre contenía una nota: “Debes terminar tú el cuadro, chico”.

Sin saber muy bien por qué, al día siguiente compró unas pinturas acrílicas y unos pinceles y se puso a pintar sobre el cuadro inconcluso. No conocía aquel rostro que, tras varias horas de afanoso trabajo, había acabado plasmando sobre el lienzo. “¿Eres tú, padre?” preguntó en voz alta. Aquella figura del cuadro respondió: “Sí”. Y todo se volvió oscuro.

Marco se sentía extraño, como si un millón de pinzas le sujetaran a una extraña red. No podía moverse ni articular palabra. Ante él, un hombre le daba la espalda.

Gracias, chico dijo el hombre, girándose lentamente. Esta vez me he arriesgado demasiado, pero lo has hecho bien.

El hombre, que tenía el cuerpo y el rostro de Marco, sonreía de una forma siniestra.

—Llevo haciendo esto durante generaciones, chico –continuó, mientras levantaba el cuadro. Marco sintió vértigo al ser izado–. Pero no necesitas saber más. Ahora ya solo me queda añadir este cuadro al resto de la colección.



Relato para el microrreto de El Tintero de Oro: EL ARTE Y LA LITERATURA.

https://concursoeltinterodeoro.blogspot.com/2025/09/microrreto-el-arte-y-la-literatura.html


18 comentarios:

Anónimo dijo...

Buen relato, desolación

Fernando Figueroa dijo...

Me queda la duda de saber si era de verdad su padre o un impostor. Un texto muy sugerente. Invita a fantasear sobre lo anterior y posterior a la historia. Saludo.

Merche dijo...

Hola, qué intriga, un relato misterioso y casi de miedo diría yo. Te da, incluso, si te apetece, para un relato más largo conservando ese misterio o, quizá, desentrañando las dudas que deja. Un buen aporte al reto.
Muchas gracias por participar en el microrreto del Tintero.
Un abrazo. :)

Nuria de Espinosa dijo...

Un micro muy siniestro. Una herencia que nadie aceptaría. Me ha parecido genial. Un saludo

Gabiliante dijo...

Este sí que es un ave fénix. Y sí que se arriesgó, pero como solo hay posibilidad de ganar.... en mi caso hubiera fracasado , más por incapacidad para pintar decentemente , que por enfado.
Muy significativo ese "chico"
Abrazooo

Juana Medina dijo...

Misterio, intriga, terror, tan bien manejados para tan pocas palabras. Estupendo. Un saludo

Juana Medina dijo...

Misterio, intriga, terror, tan bien manejados para tan pocas palabras. Estupendo. Un saludo

lady_p dijo...

Intriga y misterio...Dan ganas de seguir leyendo. Buena aportación. Saludos!
lady_p

Marta Navarro dijo...

Un relato inquietante y misterioso a más no poder. Estupendo, Igor.

Marcos dijo...

Has escrito un cuento inquietante y sobrenatural que mezcla misterio y horror psicológico; con una prosa tensa y evocadora, narra la historia de Marco, quien recibe un legado póstumo de su padre ausente: un cuadro inacabado de un hombre sin rostro y una nota que lo urge a completarlo. La narración, cargada de suspense, describe cómo Marco, impulsado por una fuerza inexplicable, pinta un rostro desconocido que, al preguntarle si es su padre, responde “Sí”, sumiendo todo en oscuridad. El giro escalofriante revela a Marco atrapado en una “extraña red”, enfrentado a un hombre con su propio rostro que, con una sonrisa siniestra, confiesa haber perpetuado este ciclo durante generaciones, coleccionando cuadros como trofeos. Los detalles –las pinturas acrílicas, el vértigo al ser “izado”, la nota críptica– crean una atmósfera de creciente desasosiego. Me gusta tu capacidad de transformar un legado en una trampa macabra, la fusión de lo cotidiano con lo sobrenatural y la exploración de la identidad robada. Es escalofriante la invitación que supone la historia a que imaginemos la siniestra galería de un padre que colecciona almas, atrapando a Marco en un lienzo eterno.
Saludos

J.C. dijo...

Ante todo yo nunca habia entrado a este blog es absolutamente nuevo para mi, apenas vi esos ojos en la penumbra que son la portada del blog, me dije aqui viene algo bueno....

y si, el relato es una joya hermosa, lo cual me hace reflexionar si me hubiese pasado a mi, siendo yo el chico, quizas estaria a salvo porque soy de esos procastinadores.

Pero bueno ya en cuento al relato en si mismo, el Padre me ha encantado, como villano es lo mejor de lo mejor, usa un metodo que puede o no darle resultado dependiendo de la disposicion a completar el cuadro que tenga cada "chico", capturar pues cuerpos y almas con ese metodo es original y bastante emocionante tambien.

me ha encantado encontrar tu blog y trabajos, me quedo aqui.

Marifelita dijo...

Hola!
Me ha encantado tu relato, con ese estilo digno de Poe, por lo oscuro e inquietante. Me ha parecido muy original y sorpresivo el final! Una idea genial! Te felicito! Un abrazote!

Trujamán dijo...

Hola Igor
Si Marcos hubiera sabido el regalo envenenado que había heredado, otro hubiera sido el desarrollo del relato... Pero, cayó en la trampa. Sin estar seguro siquiera de si era realmente su padre, sufrió el robo de su cuerpo y su vida. ¡Espeluznante!
Me encantó tu aporte. Original y atrapante. Felicitaciones. Un saludo.
Marlen

Lucila Ferreti dijo...

¡Uf, qué yuyu! Me ha dado un canguelo... Solo de pensar que del cuadro va a salir un demonio y te va a llevar por haberlo completado. A partir de ahora me andaré con ojo de no ponerme a pintar caras ni a terminar cuadros que no son míos.

Tara dijo...

Hola, Igor. Un breve relato que recuerda al retrato de Dorian Gray desde otra variante, Un cuadro que "cobra vidas" y que deja el misterio an el aire para que tus lectores podamos completrlo o imaginarlo.
Un saludo, compañero.

Raquel Peña dijo...

Esa imagen final del hombre con el rostro de Marco sonriendo de forma siniestra mientras lo izaba hacia la colección... ¡es pura pesadilla existencial! Me dejó con esa sensación de vértigo que solo logran las buenas historias de terror psicológico.
Pero más allá del susto, lo que más valoro es cómo este relato habla de las herencias familiares, de esas trampas que nos tienden las generaciones anteriores y de cómo a veces completamos los vacíos de nuestros padres con nuestro propio sacrificio. Es terriblemente poético en su oscuridad. Abrazos virtuales desde Venezuela

Ainhoa dijo...

Da miedito, muy bien relatado. No veas la colección del señor. Un saludo.

Francisco Moroz dijo...

Un relato un pelín siniestro que me ha originado un escalofrío.
Buena narrativa.
Abrazo.