La sangre sobre la nieve es más roja; el crimen se vuelve desolador. Mi
cuerpo se estremece y tiembla al soplar el viento frío del invierno,
pero no siento nada. Mi aliento me envuelve y a mis pies yace mi
víctima, ya casi sin vida.
La sangre sobre la nieve es más roja; el dolor desaparece antes. Mis manos están sucias. Aprieto los puños y me encojo. Me arrodillo y me abrazo a mí mismo, mientras caigo. Mi cara sobre la nieve y todo rojo a mi alrededor, pero yo sólo quiero cerrar los ojos y dejarme llevar. Todo acabará pronto, lo sé.
La sangre sobre la nieve es más roja; un último latido agónico trae el fin del horror. Mis actos definen lo que soy; un cruel asesino, un loco perturbado.
La sangre sobre la nieve es más roja; las sombras por la noche son aún más oscuras.
La sangre sobre la nieve es más roja; el dolor desaparece antes. Mis manos están sucias. Aprieto los puños y me encojo. Me arrodillo y me abrazo a mí mismo, mientras caigo. Mi cara sobre la nieve y todo rojo a mi alrededor, pero yo sólo quiero cerrar los ojos y dejarme llevar. Todo acabará pronto, lo sé.
La sangre sobre la nieve es más roja; un último latido agónico trae el fin del horror. Mis actos definen lo que soy; un cruel asesino, un loco perturbado.
La sangre sobre la nieve es más roja; las sombras por la noche son aún más oscuras.
-----------------------------------
Relato colgado previamente en las webs literarias ArtGerust, Léptica y Literatura Nova (donde se puede descargar en pdf), aunque surgió de la propuesta del II Concurso Getafe Negro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario